El intento (de la casta política), de echar del pueblo a un ciudadano muy crítico desde siempre con los políticos que nos han llevado a la ruina.


23-07-14 19:01
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inmanuel0
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El intento (de la casta política), de echar del pueblo a un ciudadano muy crítico desde siempre con los políticos que nos han llevado a la ruina.
El intento (de la casta política), de echar del pueblo a un ciudadano muy crítico desde siempre con los políticos que nos han llevado a la ruina.


Acciones encaminadas a echarme del pueblo de Ateca.

Mi casa situada en Barrionuevo, nº 21, en la localidad de Ateca ha sufrido durante los últimos años una agresión completamente mal intencionada e incluso prevaricadora con dolo.


Guardo documentación de arreglos que se realizaron en la misma antes del matrimonio de mis abuelos, está documentación hace referencia a otra anterior que sitúa con pruebas la antigüedad de la casa en un mínimo de 260 años. Posiblemente sea la casa más antigua de la calle. La parte posterior de la misma daba a unos corrales que dependían de la harinera. Toda esa parte trasera da a un gran patio interior que circundarían la calle Barrionuevo y la calle La Solana. Todo ese patio interior ha sido declarado zona verde, pero en el Nuevo Plan de Ordenación Urbana se le permite a uno de los propietarios de los corrales edificar una vivienda que taparía completamente todas las ventanas y balcones de mi vivienda. Se le va a permitir realizar una edificación dentro de un corral sin salida a la calle de seis metros de profundidad desde mis paredes al interior del corral.


Esto significa un intento de emparedar la vivienda dejándola sin ningún tipo de ventilación en la parte posterior.


En la parte delantera por la calle Barrionuevo, cuando durante la dictadura de Franco se metió el agua en las viviendas y se empedraron las calles el alcalde y “Jefe Superior del Movimiento” de la provincia de Zaragoza. Mandó elevar la altura de la calle más de un metro, lo que provocó que mi vivienda pasará a tener la sala, el masador y la bodega por debajo de la rasante de la calle. La polémica con el alcalde fue tan fuerte que se llegaron a decir cosas como el que la calle se elevaría más de un metro y que tuviera mucho cuidado mi padre, no le fueran a pegar dos tiros y dejarlo dentro de la zanja.


Cuarenta años más tarde el alcalde socialista Señor Sada arregló por fin con nuestro dinero la calle, y elevó su firme en 10-15 cm más, dejando la recogida de aguas de lluvia exactamente al lado de mi puerta de entrada.


Pedí en carta dirigida a todos los representantes de los grupos políticos del ayuntamiento, para que no se elevará más el firme de la calle y les pedía amparo para que la recogida de aguas se llevará al centro de la calle.


NINGUNO de los grupos políticos respondió a la petición de amparo de un ciudadano, y el señor alcalde respondió diciendo que la calle se quedaba como estaba.


El intento de construir por la parte posterior una edificación y que se ha recogido en el futuro Plan de Ordenación Urbana y las humedades que recibe la casa desde la puerta de entrada buscaban y prácticamente han logrado el objetivo de echarme del pueblo.


Barrionuevo tiene como cimientos, un montículo de piedra que va desde lo alto de las eras hasta lo más bajo de la Solana. El no haber limpiado nunca los carriles de los alrededores de las eras hace que el agua se encharque en los mismos y baje por el interior de corrales y de la calle Barrionuevo a chocar con la pared maestra de mi casa que da a la calle, estando como decía gran parte de mi vivienda, por debajo del nivel de la calle las humedades están siempre garantizadas.


Hay incluso una vivienda en frente de la mía que echa las aguas sucias de un cuarto de baño directamente por debajo de la calle hasta la rejilla de recogida de agua de lluvia, generando un olor nauseabundo.

Cuando arreglaron la calle las amistades, el sectarismo hacen que se permita en contra de la ley verter aguas sucias desde esas viviendas a unas rejillas de aguas que las llevan directamente a la acequia del riego.


Fue curioso durante aquel período de obras ver como el ayuntamiento ponía acometida de agua a los corrales. Yo había preguntado hacía poco tiempo a la empresa de aguas del precio de meter el agua en el corral y me pareció muy caro para regar 14 macetas. Durante las obras un día veo como se rompe la pared de mi corral y se mete el agua en el mismo. Al día siguiente volví a ver como sacaban toda la acometida, tapaban los agujeros para los que yo no había dado permiso, y quitaban así la acometida de agua en el corral. Tapando incluso un agujero centenario que sacaba a la calle las aguas de lluvia del corral.


Todos estos datos hablan de una forma clara y concreta del intento desde el poder de echar a un ciudadano de su casa, y por lo tanto de su pueblo.


El hecho de emparedar mi vivienda, por un lado con las aguas y por el otro permitiendo en un futuro la construcción de una vivienda en el interior de un corral que permitirá cerrar las ventanas y balcones de mi vivienda (a pesar de haber sido catalogado todo ese patio interior como zona verde), es lo que yo denominaría intento autoritario y espurio de hacer abandonar a un vecino su vivienda (la más antigua del barrio) y su pueblo con el beneplácito de todos los grupos políticos del ayuntamiento.


Un hecho de este tipo no se llevó nunca a cabo durante la dictadura franquista ni siquiera con los enemigos del régimen.



Manuel Pérez Barra –“Cucarro”-